Los cosmetólogos del mundo lo describen como un verdadero milagro y no han dudado en sumar a los tratamientos de skincare este novedoso principio activo en sus tratamientos, ¿de qué se trata el Dragon’s Blood?
Solo el nombre –Sangre de Dragón en español– da cuenta de lo potente que es y lo que podemos esperar como resultado al utilizarlo, seguí leyendo y descubrí de dónde viene, cómo actúa y cómo incluirlo en tus tratamientos.
Dragon’s Blood en la naturaleza
La savia obtenida del árbol tropical Croton Lechleri es el ingrediente principal con el que se prepara este producto. Su llamativo color rojizo y consistencia viscosa es lo que le da el nombre tan particular.
Pero el Dragon’s Blood no es nuevo, al menos no para las antiguas civilizaciones que ya se beneficiaban de su gran poder antiinflamatorio, cicatrizante y antibacteriano, con resultados eficaces y rápidos. Fueron justamente estas propiedades las que llamaron la atención de los cosmetólogos y que hacen que este producto sea único.
¿Cómo actúa?
Su fórmula compuesta por proantocianidinas, taspina y tignanos, ayuda a prevenir las marcas visibles del paso del tiempo, como arrugas y manchas. Además aporta hidratación a la piel.
Gracias a su característica regeneradora, la piel se verá más firme y con mayor elasticidad. Ser antioxidante es otra de sus características principales, esto permite proteger las fibras de colágeno y elastina, evitando su descomposición.
Este poder antioxidante, que puede llegar a ser incluso más intenso que la Vitamina C utilizada en cosmetología, protege la piel de radicales libres generados por la polución, exposición solar, tabaco y otros agentes externos.
Productos y tratamientos con Dragon’s Blood
Si tus pacientes te piden detener el avance y mitigar la apariencia de los signos de la edad, los productos con este componente son una gran alternativa que podés recomendar como una solución integral.
Productos como el Sérum Anti-Age de la línea Professional Beauty han ido un paso más lejos, sumando al Dragon’s Blood otros ingredientes. El Chronoline™ es uno de ellos, este polisacárido es conocido por su acción regeneradora, ayudando a la hidratación, elasticidad, unificación del tono y textura de la piel. Además, para aportar firmeza y suavidad por más tiempo, el Sérum Anti-Age incorpora Ácido Hialurónico, que actúa como un gran complemento para resultados más duraderos. También incluye Alantoína, con propiedades calmantes y anti-irritantes, ideal para pieles más sensibles.
Este producto es perfecto para agregar a tratamientos como Dermapen, Terapia Led (o Fototerapia), Electroporación, por solo nombrar algunos.
Recomendarlo como tratamiento para el hogar y así complementar el efecto de los procedimientos realizados es también una gran opción para tus pacientes. Incluir este tipo de productos a la rutina diaria de cuidado facial, especialmente sérums, es altamente beneficioso por su alta capacidad de hidratación. Podés sugerir su uso con máscaras de silicona e hidrofílicas.
Otro producto que incluye la Sangre de Dragón es el Sérum Post Treatmet BB Kiss, el boost de hidratación que, gracias a este compuesto, cicatriza los labios luego del procedimiento. Además, al proteger las fibras de colágeno, permite resultados más duraderos. Ideal para agregar a tus tratamientos de BB Lips para que tus pacientes tengan labios visiblemente más jóvenes, con más volúmen y de manera natural.
¿Para quiénes está recomendado?
Recomendado para personas que quieran disminuir arrugas, manchas, pieles con falta de hidratación o sensibles.
¿Te quedan dudas sobre su uso y aplicaciones? Conocé más en nuestra capacitación online de Química Cosmética, donde aprenderás todo sobre los ingredientes y componentes químicos aplicados en cosmetología.
Y vos, ¿conocías este ingrediente? Contanos en comentarios cuáles son tus sérums anti-age favoritos.
